NEFROPATÍA DIABÉTICA
La nefropatía diabética es una complicación grave de la diabetes tipo 1 y 2 relacionada con los riñones. También se le llama enfermedad renal diabética. Aproximadamente el 25 % de las personas con diabetes sufren de enfermedad renal con el paso del tiempo.
La nefropatía diabética afecta la capacidad de los riñones para realizar su trabajo de eliminar los productos de desecho y el exceso de líquido del cuerpo. La mejor manera de prevenir o retrasar la nefropatía diabética es tratar la diabetes correctamente y mantener controlada la presión arterial.
Con el transcurso de los años, la nefropatía diabética daña lentamente el delicado sistema de filtración de los riñones. El tratamiento temprano puede prevenir o retrasar la evolución de la enfermedad y reducir la posibilidad de complicaciones.
La enfermedad renal puede evolucionar y convertirse en enfermedad renal terminal. La insuficiencia renal es una afección que pone potencialmente en riesgo la vida del paciente. En esta etapa, las opciones de tratamiento son la diálisis o el trasplante de riñón.
La nefropatía diabética es una complicación común de la diabetes tipo 1 y tipo 2. Con el tiempo, la diabetes mal controlada puede causar daño a los grupos de vasos sanguíneos en los riñones que filtran los desechos de la sangre. Esto puede causar daño renal y presión arterial alta. La presión arterial alta puede causar más daño renal al aumentar la presión en el delicado sistema de filtración de los riñones.
Varios otros factores pueden aumentar el riesgo de nefropatía diabética, entre ellos:
- Niveles de azúcar mal controlados
- Hipertensión arterial descontrolada
- Ser fumador
- Nivel alto de colesterol en la sangre
- Antecedentes familiares de diabetes y enfermedad renal
Las complicaciones de la nefropatía diabética pueden aparecer progresivamente durante meses o años. Pueden incluir:
- Retención de líquidos, que podría provocar hinchazón en los brazos y las piernas, presión arterial alta o líquido en los pulmones (edema pulmonar)
- Aumento en los niveles de potasio en la sangre (hiperpotasemia)
- Enfermedad cardíaca y vascular (enfermedad cardiovascular), que posiblemente desencadene un accidente cerebrovascular
- Complicaciones del embarazo que implican riesgos para la madre y el feto en desarrollo
- Daño irreversible en los riñones (enfermedad renal terminal), que eventualmente requiere diálisis o un trasplante renal para sobrevivir
En las primeras etapas de la enfermedad, tu plan de tratamiento puede incluir varios medicamentos, como los que ayudan en lo siguiente:
- Controlar la presión arterial alta.
- Controlar los niveles altos de glucosa sanguínea.
- Disminuir el colesterol alto.
- Controlar la proteína en la orina.